God of War. Análisis/Opinión
El Dios de las consolas
Sony Santa Mónica se lo tenía muy callado durante varios años, tras los signos de desgaste en la saga que supuso Ascension, el estudio con Cory Barlog en cabeza se puso manos a la obra para dar un giro en la vida de Kratos que nadie imaginaba.
Fué en el E3 de 2016 cuando vimos por primera vez a un Kratos más viejo, experimentado y con cicatrices morales que tardan en cicatrizar pero lo que más nos sorprendió fue su hijo Atreus, además de una nueva ambientación nórdica. Otra de las sorpresas que trajo aquel asombroso tráiler fue la cámara, libre y situada detrás del hombro. Empuña un hacha y su hijo nos acompaña como aprendiz tras la muerte de su madre. Todo es confuso hasta que vemos al espartano en acción y nos preguntamos "¿esto es en tiempo real?"... SÍ.
Pasaron dos largos años y dos E3 más con tráilers que sólo nos dejaban pinceladas de lo que en realidad el juego llega a ser y algunos detalles de la historia, tan fascinante por su nueva localización nórdica como intrigante por conocer el porqué llegó allí el Fantasma de Esparta y su evolución como padre.
Dos meses han pasado desde su salida y es el tiempo que he tardado en terminarlo al 100%, es decir, conseguir el Trofeo Platino. No es que necesites tanto tiempo, unas 60-80 horas serán suficientes dependiendo de tu habilidad pero si lo que buscas es ir a por la historia, unas 30 horas serán más que suficientes.
El juego comienza más o menos como en la demo de 2016 pero con algunos cambios aunque lo que más llama la atención es su apartado técnico, impresionante incluso en una Ps4 Fat, en Pro es un abuso.
Tras avanzar y superar varios tutoriales nos damos cuenta de que sí, efectivamente el juego era lo que nos habían enseñado y el manejo de Leviatán (el hacha) es suave y preciso, con un cambio significativo en cuanto a los golpes, pasamos de "cuadrado y triángulo" para golpe normal y golpe fuerte a "R1 y R2" como si de un Dark Souls se tratase aunque podemos cambiarlo en cualquier momento para los más puristas.
Pronto nos damos cuenta de que la misión que se nos ha enconmendado, llevar las cenizas de la madre del "chico", no será tarea fácil y tras varios enfrentamientos épicos al principio de la aventura tomaremos una dinámica más pausada, de exploración en un mundo semi abierto que esconde muchos secretos.
Kratos trepa y salta pero de manera más automática y siempre acompañados de Atreus, quien se moverá libremente por el escenario y que sólo atenderá a nuestra llamada en combate pulsando "cuadrado" para lanzar flechas y dejando pulsado ese mismo botón para usar sus habilidades. Conforme avancemos, irémos encontrando multitud de cofres, cada uno con un contenido más valeroso que otros e incluso muchos con puzles de por medio que tendremos que superar para conseguir su preciado botín.
Podemos personalizar a Kratos y Atreus con diferentes armaduras, armas y habilidades para subir de nivel, pues en este juego ya no depende de conseguir sólo experiencia sino de saber administrar el equipo, colocar los elementos en sus ranuras para que nuestros parámetros suban o bajen según nos convenga como si de un juego de rol se tratase.
El árbol de habilidad es extenso y variado y una vez lo tengamos desbloqueado veremos al Dios de la Guerra hacer de todo para masacar a los enemigos, que si os lo peguntáis , sí, serán muchos y variados. Algunos enemigos son invulnerables a ciertos elementos por lo que en determinado momento de la historia debemos saber con que arma atacar. Además no faltan los enemigos de gran tamaño y los QTE se han simplificado para que lo que premie sea el combate.
Contamos con un botón de esquiva "X" y un escudo para protegernos, pues ahora los combates son más tácticos y no un machacabotones como antaño. Al pulsar "R3" marcamos al enemigo y pulsando "abajo" en la cruceta damos la vuelta rápida, pues los enemigos nos atacan sin piedad desde todos lados.
Podremos mejorar nuestras armas y armaduras gracias a los hermanos herreros Brock y Sindri, dos maestros enanos con un sentido del humor que da un toque gracioso a los momentos relajados de la aventura.
Otra de las novedades en el combate es el poder lanzar nuestro arma al enemigo y recuperarlo con "triángulo" o una combinación de botones para realizar un combo. Al principio parece no servir de mucho pero a la larga es una herramienta esencial sobretodo para paralizar a enemigos voladores. Además cuando mejoramos del todo a Atreus y lo combianos con nuestros ataques el resultado es bestial.
El ritmo de juego puede parecer algo lento durante las primeras horas después de un comienzo épico pero claro, nos presentan el mundo en el que nos movemos, Midgar, además de visitar otros reinos en busca de respuestas. Eso sí, la historia y como la cuenta con el plano secuencia hace que las horas pasen sin ser conscientes del rato que llevamos frente a la consola, sin pantallas de carga y siempre manteniendo la intriga tras casa secuencia esperando ver el impresionante final.
El mundo o los mundos que se nos presentan son grandes pero podremos usar el viaje rápido desbloqueando portáles y en varios reinos tendremos a nuestra disposición una canoa en la que Kratos y su hijo, además de Mimir, mantien conversaciones de lo más interesante que hacen el viaje más ameno.
El apartado técnico roza el abuso, con unas expresiones que sólo Uncharted 4 es capaz de acercarse, unos paisajes que te dejan mirando el escenario durante minutos y unos efectos de luz y partículas dignos de la generación en la que estamos.
Los enemigos más grandes como los trolls que vimos en el primer tráiler podrían pasar como jefe final en cualquier juego de esta generación pero es que hasta los enemigos más comunes tienen detallado hasta el último polígono o textura con el que está hecho.
El viaje a Jotunheim es largo y lleno de obstáculos. No quiero hablar de la historia para no entrar en spoilers, pero encontraremos aliados, enemigos muy poderosos y mucho contenido sobre la mitología nórdica que hasta este juego, yo por lo menos desconocía. Si os preguntáis si se habla algo de los anteriores juegos, sí, hay momentos y sobretodo uno que es para aplaudir y que a los más veteranos os recorrerá un escalofrío al jugarlo. Aunque lo que más me ha gustado es la evolución en la relación padre e hijo, similar a lo visto en The last of us con Joel y Ellie pero que deja claro que este es el primero de muchos nuevos God of War.
La aventura principal, como ya he dicho, dura unas 30 horas pero el end-game es brutal: coleccionables, derrotar a las Valkirias, dos nuevas zonas, mejoras de equipo, misiones secundarias, modo foto y el recién anuncido New Game +.
En denfinitiva, God of War es un reinicio de la saga pero sin olvidar todo lo acontecido con los dioses del Olimpo, que nos trae un viaje apasionante en que Kratos tiene enterrado su pasado y quiere ocultar el monstruo que lleva dentro a su hijo, ajeno al pasado de su padre e ignorante de que es un dios. Un viaje en el que enseña a Atreus que todo tiene sus consecuencias y que el mundo en el que vive está lleno de peligros.
Una obra maestra que entra directamente en el Olimpo de la industria.
Flidus2014.
